En la provincia de Chubut, y habiendo arribado al Istmo Carlos Ameghino, se puede divisar el Golfo San José y el Golfo Nuevo. Puerto Pirámides es el paso obligado de todos los turistas en su viaje a la Península Valdés, una introducción a la magia de la estepa patagónica que contrasta con las aguas del Atlántico y su fuerza incesante, rompiendo en mil olas contra los farallones y acantilados de la costa.
Esta estrecha franja de tierra patagónica de 35 km de largo, con su suelo árido y las salinas más profundas de Sudamérica, posee un recurso faunístico marino muy importante y de reconocimiento internacional. La reproducción y alumbramiento de la Ballena Franca es un espectáculo que la naturaleza ofrece gratuitamente, año a año, de junio a diciembre. Las orcas podrán ser vistas más frecuentemente, entre febrero y mayo, y los delfines y toninas, durante todo el año.
Puerto Pirámides es una villa balnearia frecuentada por los amantes de la naturaleza en su estado mas prístino y será, sin dudas, una experiencia imborrable para todo aquel a quien la curiosidad lleve a recorrerla.
Sus playas de suave declive están protegidas por acantilados que semejan pirámides, a los cuales debe su nombre, y en los que se encuentra gran cantidad de restos de invertebrados fosilizados hasta 9 millones de años atrás.