Fuentes de varias historias: Colección Dimensión Argentina de Editorial Solar/Hachette Chaco es una voz guaraní que significa Desierto, siendo también una voz quichua: cuyo sentido indica Caza de animales con cerco de gente. La región del Chaco fue ocupada desde varios siglos atrás, por diversos grupos aborígenes entres quienes podemos citar: Tobas, Pilagás, Mocovíes, Matacos, Chorrotes, Chulupies y Chiriguanos-Chanés. A decir del poeta: ”cuando era un serio problema remontar el río Pilcomayo por sus anuales correntadas de agua y limo, ellos eran los únicos que lo navegaban libremente porque lo conocían a fondo y la chalana les respondía con voz de madera". La mayoría de las comunidades fueron recolectoras y cazadoras, muy pocas fueron las que cultivaron la tierra como forma de adquirir alimentos. El historiador Ernesto Maeder define así las características del aborígen de la zona: “El indio chaqueño quiere ser independiente. Jamás llegará a someterse por completo. La libertad es su único culto, es su Dios; ser libres como las aves es su sólo anhelo, la sola ambición de su alma; el cuerpo es nada para él, lo expone a cada paso que da y pierde la vida en cualquier instante, con sentimiento. Cuando se encuentra libre y absoluto en sus campos, con gusto, pero con el corazón henchido de fiereza, cuando se encuentra cautivo, cuando ve comprometido el ideal que hace la única dicha de su vida: la libertad de su raza”.
Resistencia nació como colonia-cantón, trazada en 1875 en el antiguo paraje “San Fernando”. No fue poblada de inmediato desapareciendo mojones y estacas. No obstante, con fecha 27 de enero de 1878 el gobierno nacional aprobó la mensura inicial y creó oficialmente la Colonia Resistencia. El Chaco constituyó, durante mucho tiempo, un grave problema para la Nación. Ni los españoles de los siglos XVI y XVII, ni las misiones jesuíticas a mediados del siglo XVIII lograron asentar allí sus reales de manera definitiva, ni tampoco reducir el dominio del indio. En el Chaco dada su condición de tierra marginal y todavía peligrosa, la colonización debió iniciarse con pleno apoyo oficial. Luego de la Guerra de la Triple Alianza, desde 1865 a 1870, el gobierno nacional conquistó militarmente la zona. En 1874, se dispuso por ley el establecimiento de 4 cantones en la costa del Paraná y en 1875 se reglamentó la ejecución de esas medidas a través de una comisión exploradora encargada de elegir los lugares y trazar los pueblos y colonias en Timbó, Las Toscas y San Fernando. Por último, en virtud de la Ley de Colonización, se concretó en 1877 el envío de agricultores europeos a las colonias trazadas. Fue así como se poblaron los pueblos de Resistencia en 1878, Avellaneda (ex Timbó) en 1879 y Las Toscas en 1880. A bordo del “Río Paraná” partieron friulanos desde
Buenos Aires, el 17 de enero de 1878 hacia
Corrientes, llegando el día 21. Casi de inmediato, un pequeño grupo encabezado por Jerónimo Pérez e integrado por Luis Pessano, Pedro Dellamea, Julio Geraldi se trasladó al lugar que iba a poblar el contingente en el paraje San Fernando, ya Colonia Resistencia. Los “adelantados” visitaron los establecimientos del Coronel Avalos y Félix Seitor y otros obrajeros. Finalmente, se fijó la partida para la tarde del día 26 de enero y dos lanchones remolcados por un vaporcito cruzaron el Paraná y se internaron en el río Negro. El desembarco del día siguiente alivió las penurias de la travesía. Ya estaban en la Colonia Resistencia, ese 27 de enero de 1878, unas 250 personas que abrían la ruta de otros que iban a llegar ese mismo año. El 19 de enero de 1879 arribó un nutrido contingente, en su mayoría trentinos, y otro grupo en 1880. La gesta colonizadora definitiva del Chaco era una realidad. En el año 1876 se produce un ataque a la población del General José Domingo Avalos, que estaba asentada en las inmediaciones de la otrora Reducción de San Fernando del Río Negro (hoy zona del Triángulo de Resistencia). El ataque fue comandado por el cacique Leoncito (indio Vilela) y era el tercero en el año. En 1884 el gobierno central de Buenos Aires, dividió la zona en el Chaco al sur y Formosa al norte. Algunos historiadores sostienen que el nombre de “Resistencia” fue originado en ese ataque indio, “por el hecho de haber resistido durante tanto tiempo un corto número de hombres, sin protección del Gobierno, las continuas amenazas de los aborígenes”. El primer Concejo Municipal de la ciudad funcionó en un antiguo local provisorio, hasta muchos años después ya que el edificio que se construyera para este fin, fue cedido para que funcionara la casa de Gobierno el 25 de octubre de 1896. Por decreto de fecha 19 de noviembre de 1908 del Ministerio de Agricultura de la Nación, le es concedido a la Municipalidad el Solar “A” de la Manzana 104, y recibe posteriormente el título de propiedad del Presidente de la República, Dr. José Figueroa Alcorta. A principios de siglo XX la actividad taninera iniciada en
Santa Fe penetró en el
Chaco. El mejor ejemplo fue la explotación indiscriminada de la compañía inglesa La Forestal. La crisis del tanino dejó tras de sí un bosque degradado y más de 50.000 personas sin trabajo. Después de la Primera Guerra Mundial empezó el auge del algodón que duró hasta los años ‘50. En 1951, Chaco se transformó en provincia.