Ubicado frente al barco hundido e inaugurado en el año 1998, el túnel submedanal contó para su construcción con el apoyo incondicional de todo el pueblo. Este túnel conecta Reta con el mar.
Reta es una villa turística maravillosa, un viaje hacia un lugar paradisíaco que tiene sus seguidores que año tras año mantienen su fidelidad con el lugar.
No es de extrañar que en Reta (“en el medio de la nada” para algunos o “en el lugar exacto” para muchos) a un grupo de vecinos se les haya ocurrido hace mucho tiempo construir un túnel submedanal (único en la Argentina) para pasar de la ciudad al mar evitando caminar por la arena.
Un día la pequeña Reta pasó a estar en boca de todos por la construcción de su túnel submedanal, que permite el paso a la playa por debajo de las dunas.
En Reta, una larga cadena de medanos posee de 200 a 400 metros desde la orilla del mar y se encuentra fijada con tamariscos, pero en verano el calor y a veces el viento hacían intransitable el paso de un lugar al otro. Así surgió la idea.
El túnel fue inaugurado en 1998 y logró atraer la presencia de curiosos y visitantes. Hoy, una pequeña puerta oficia de apertura a esta fascinante experiencia, que si bien es relativamente rápida y corta, llama la atención de muchos visitantes, en su mayoría jóvenes, que pasan por el túnel una y otra vez, de un lado al otro.
Frente al túnel se encuentra el famoso barco hundido de la zona y cuando el mar se encuentra bajo, pueden apreciarse los restos de esta embarcación a la que se accede por la bajada de la calle 40.
Las fotos típicas dentro del túnel son parte de la experiencia de haber estado veraneando en la ciudad de Reta. Basta con nombrarlo para entender que esta pequeña pero genial obra de la ingeniería civil sea uno de los íconos emblemáticos de la pequeña villa turística.