La principal característica de la ciudad de Zapala es que sirve de nexo entre los circuitos turísticos más apreciados de la provincia del Neuquén. Ubicada en su área central, sirve de transición entre la estepa patagónica y la cordillera andina. Está acompañada por la cordillera del Chachil, que encierra espléndidos valles.
Se caracteriza por un clima seco, ventoso y muy duro tanto en verano como en invierno por sus temperaturas extremas. Su altura sobre el nivel del mar es de 1.012 metros y su vegetación es de tipo xerófila y escasa. Su nombre proviene del mapudungun (habla de la tierra en la comunicación mapuche) y significa "pantano mortal".
Para citar alguno de los corredores turísticos que se inician en Zapala, hacia el noroeste se accede al llamado Portal del Pehuén. En él se halla
Copahue, el centro termal más afamado del país por las propiedades de sus aguas. También se ubican los centros de esquí Caviahue y Primeros Pinos, donde abundan los bosques de araucarias ancestrales. También se ingresa a corredores lacustres de gran relevancia en el turismo internacional como Junín de los Andes,
San Martín de los Andes, Villa Pehuenia, Aluminé y Caviahue.
Otra opción interesante es descubrir el parque nacional Laguna Blanca con sólo andar 30 kilómetros desde Zapala. En sus humedales, alberga gran cantidad de aves y diversas formas de vida acuáticas y terrestres ideales para un safari fotográfico.
En los últimos años se ha incrementado la oferta gastronómica y de hotelería debido al intenso movimiento turístico que generan las rutas que llegan por Zapala desde el este del país. Esto incluye la apertura de un casino y varias lineas de ómnibus de larga distancia provinciales y nacionales que llegan y salen de la localidad por ruta.