Peñón del Águila es un parque temático donde el visitante puede disfrutar de innumerables actividades. Trekking, tirolesa, paseos por el río del Medio, circuitos especiales para andar en cuatriciclos y hasta un tren-tractor que invita a subirse a quien lo pare. El mejor lugar de las sierras pensado para toda la familia.
Peñón del Águila nació pensado para que lo elija toda la familia.
Se trata del primer parque temático que tienen hoy las sierras cordobesas y que se encuentra abierto durante todo el año.
La Cumbrecita es un pequeño pueblo ubicado dentro del valle de las Sierras Grandes de Córdoba, a 1.450 metros sobre el nivel del mar, altura que le aporta un microclima ideal para practicar actividades de montaña.
Peñón del Águila es un emprendimiento de Sergio Roggio e implica un acercamiento distinto al espacio, para proteger la reserva natural e incorporar distintas propuestas recreativas que no afectan esta prodigiosa naturaleza.
Las opciones son varias en La Cumbrecita. Una vez que los turistas recorren el centro histórico, se llega a la estación del Cedro, donde un pequeño tren tirolés bautizado Adller Express traslada a todos hasta la estación del Pino. Allí funciona el centro de actividades Refugio de Gambrinus.
La propuesta recreativa es muy rica y para todas las edades. Para los amantes de la aventura, el vértigo y la adrenalina es ideal el arborismo y el vuelo del águila, un circuito de plataformas sobre árboles que desemboca en una secuencia de tirolesas de 700 metros de longitud que cruza de montaña a montaña por sobre ríos y cascadas.
La práctica de la escalada deportiva y el rapel, junto a una nueva palestra recién construida, son actividades que se ofrecen al visitante, al igual que las caminatas y la contemplación del paisaje que nos rodea.
Para ello existen varios senderos autoguiados de interpretación con distintos recorridos por esta bella reserva natural, todos con la presencia de una cartelería precisa que nos enseña un poco mientras caminamos o nos detenemos a respirar el aire puro que aquí es parte del sentido común de sus habitantes.
Otra de las excursiones es el desafío todo terreno por el bosque, cruzando arroyos y observando en todo momento la magia de las montañas. De este modo logramos ser partes de un paisaje único con una excursión guiada en cuatriciclos ecológicos.
A la hora de almorzar, las opciones son variadas, pero para los que gustan de la buena cocina la propuesta de degustación de platos típicos centroeuropeos en el Refugio de Gambrinus es la más recomendada.
Desde aquí se tiene una excelente vista de las Tres Cascadas, un lugar de ensueño que no puede dejar de conocerse.
La leyenda de Gambrinus, que se desarrolla a la tarde, es otro momento para encontrarse y disfrutar junto a toda la familia. Se trata de una comedia musical que por medio de la danza y el humor nos cuenta la historia de la creación de la cerveza.
Ícono del pueblo por su simpatía y desfachatez, el personaje llamado Gambrinus es quien da nombre al refugio y se transformó en uno de los protagonistas de La Cumbrecita.
Un lugar recién inaugurado es la Casa de Gambrinus. Esta particular construcción se ubica en la oficina de informes de La Cumbrecita y desde hace un tiempo pasó a ser uno de los atractivos del poblado.
Un pintoresco reloj cucú suena cada 30 minutos y deja ver a los protagonistas del espectáculo. También invita a los presentes a conocer el interior de esta particular vivienda donde se pueden ver los hábitos y costumbres de esta familia tan especial.