La planta urbana tiene el mismo espíritu que su entorno. Calles de tránsito pausado, mucha gente a pie o en bicicleta muestran cuál es la esencia de este pueblo chubutense.
A Villa Lago Puelo se accede por la ruta provincial 16, que atraviesa todo su casco céntrico y llega hasta la costa del lago homónimo. En el trayecto intuimos su crecimiento turístico en base a la cantidad de cabañas, hosterías y hostels que acompañaron nuestro avance.
Al llegar, las avenidas Los Arrayanes, Los Alerces, 2 de Abril y Los Notros nos pusieron en contacto con las entidades públicas, de abastecimiento de combustible y locales comerciales de la localidad. Luego, por el mismo camino de acceso, nos dirigimos al lago Puelo.
Cuando llegamos a “la playita”, nos impactó el color intenso de las aguas del lago y nos sumamos a quienes ya descansaban o tomaban mate sin apuros. Desde el muelle zarpaba una vieja embarcación de madera hacia una de sus clásicas excursiones por los brazos del lago y hasta el límite fronterizo con Chile.
Desde la playa parten varios senderos hacia los bosques patagónicos. Los más visitados son los que conducen al Pitranto Grande, al Mirador del Lago y al Bosque de las Sombras. En ellos la selva valdiviana se muestra en todo su esplendor, con sus especies habituales: lenga, ciprés, coihue, ñire y radal. Su protección en días soleados permite caminatas en un ámbito agradable; solo es necesario averiguar el grado de dificultad de cada senda antes de incursionar en ellas.
De regreso en el área céntrica, conocimos el Parque Temático Millán Lemu, un espacio educativo preparado para los más pequeños pero que puede recorrerlo también un adulto. Varios circuitos por senderos boscosos y cascadas espléndidas ponen en contacto con duendes y hadas que parecen emerger de cada árbol. Son figuras realizadas con madera y cerámica por artistas locales que representan a los cuidadores originales de los bosques.
En las afueras, pero cerca, existen chacras en las que se cosecha fruta fina, y se elaboran productos envasados como dulces, salsas y patés de morillas, de ciervo y de trucha. Llevamos con nosotros varios frascos para revivir las delicias locales en nuestra casa.
Entre los eventos que se organizan en febrero de cada año en Puelo, la Fiesta del Bosque y su Entorno y el Desafío de la Montaña son los que concitan la atención de más visitantes. La primera reúne en un patio de comidas y puestos con artesanías a los productores locales; las noches brillan sobre el escenario junto a reconocidos artistas. El triatlón consiste en pruebas de running, kayak y mountain bike, y cada vez cuenta con más adeptos.
Los sabores regionales se encuentran en la rica gastronomía que ofrecen las casas de comida y restaurantes. Cordero patagónico, ciervo y jabalí en distintas cocciones son especialidades de la cocina local muy requeridas por quienes aprecian esas exquisiteces.
Villa Lago Puelo, elegida la "Perla de la Comarca", crece día tras día entre quienes la eligen para vivir y aquellos que la visitan para constatar la energía positiva que surge de sus bosques y su forma de vida.