Famoso por sus vientos constantes ideales para actividades náuticas, Monte Hermoso ha visto crecer este deporte que armoniza de manera perfecta el aire con el agua y que se ha impuesto en estas costas desde sus inicios.
Basta con caminar un rato por la costa y mirar el mar para observar decenas y decenas de hombres que colgados a sus “medialunas de colores” saltan, avanzan, juegan. Hasta se puede decir que vuelan dentro del mar con sus tablas. El kitesurf es una de las actividades que hoy más se practica en las costas argentinas.
Ideal por la presencia general de viento en el lugar, este deporte gana cada día más seguidores que buscan adrenalina al mismo tiempo que el placer de dos actividades tan dispares como el parapente y el windsurf. De la fusión de ambos sale el kitesurf.
El kite surfing o kitesurf es un deporte de deslizamiento que consiste en el uso de una cometa de tracción que capta el viento y sostiene a quien la comanda, que por su parte se encuentra sostenido en una tabla tipo wakeboard.
La idea es que quien comanda el equipo capte el viento con el barrilete o cometa y luego disponga de su velocidad, que se manifiesta cuando la tabla navega.
“Es cuestión de tiempo y de aprendizaje”, afirma la mayoría de los pilotos que hoy se ven en las costas argentinas, incluidas las de Monte Hermoso. Aconsejan también hacer un curso de iniciación para este deporte. En estos cursos el alumno tiene los primeros contactos con las partes del equipo, el funcionamiento de cada una y por supuesto las medidas de seguridad, además de la técnica correcta para “navegar el mar”, como suelen decir los fanáticos del kite.
A primera hora del día, pero sobre todo al atardecer, cuando la mayoría de los bañistas se han retirado, decenas de kites de los más variados colores fluorescentes ganan el agua y el aire, y comienza el espectáculo.
Ocupan prácticamente la totalidad del horizonte y convocan a miles de espectadores cada tarde para observar deslizamientos, carreras y los más sorprendentes saltos por encima del agua.
Los más chicos miran asombrados el espectáculo mientras que los adolescentes y jóvenes prefieren intentarlo con alguno de los profesores o escuelas que bautizan a sus alumnos. En los cursos se combinan las clases teóricas y luego las practicas, siempre que las condiciones del mar se encuentren favorables para los que recién se inician.
Hay que caminar por las playas y verlos; esto lo hace un atractivo en sí mismo. No hay dudas de que el kitesurf es uno de los deportes que más convoca en la ciudad de Monte Hermoso.
Las medialunas de colores ganan los cielos y hacen con el mar lo que quieren. Saltan, corren, cada uno lo disfruta a su antojo.