El gobierno bonaerense acordó hoy con empresarios hoteleros y gastronómicos el retiro de saleros de las mesas de unos 20 mil bares y restaurantes de la costa Atlántica y la difusión en esos locales de información sobre los riesgos para la salud que representa el consumo excesivo de sodio que puede derivar varios males que van desde la hipertensión hasta un ACV.
El acuerdo fue rubricado por el ministerio de Salud bonaerense junto a la secretaría de Turismo y la Federación Empresaria Hotelera Gastronómica de la República Argentina (FEHGRA), informó la cartera sanitaria en un comunicado.
La iniciativa se sumó al convenio que la cartera de Salud firmó con la Unión de Trabajadores del Turismo, Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (Uthgra) y la Federación Argentina de Industria del Pan (Faipa), para promover el uso racional de la sal.
El ministro de Salud provincial, Alejandro Collia, afirmó que "nueve de cada diez hipertensos pueden curarse si bajan el consumo de sal, si hacen actividad física regular y si logran un peso adecuado".
En ese sentido, destacó que el uso racional de la sal en locales de gastronomía se replicará en todos los distritos de la provincia, donde también se entregarán folletos explicativos para la prevención de la hipertensión arterial, y sostuvo que se trata de "un mal silencioso que requiere controles permanentes".
"Este es el momento adecuado para iniciar la campaña en los principales destinos turísticos, cuando la gente está descansando y resulta más permeable a los mensajes de prevención", afirmó Collia.
La Organización Mundial de la Salud recomienda no superar los cinco gramos de sal al día, "sin embargo, se calcula que en nuestro país se duplica ese consumo, y esto explica en gran medida por qué la hipertensión arterial es una de las principales causas de accidentes cerebro vasculares, infartos, discapacidad y muerte", manifestó el ministro.
La cartera sanitaria reportó que "a través de las 17 filiales que tiene en la provincia, la FEHGRA nuclea a más de 20 mil establecimientos gastronómicos y hoteles", por lo que estimó que el retiro de los saleros "alcanzará a más de 20 mil establecimientos" en la costa Atlántica.