Córdoba es la segunda ciudad más importante de la Argentina y la principal de la región central del país. Si bien se encuentra en un extenso valle, a su alrededor gana altura por distintos sistemas serranos que le aportan un microclima propio. Tiene una temperatura máxima promedio de 24º C y la mínima es de 11º C durante los inviernos.
La bella ciudad de Córdoba se ofrece al turismo no sólo por su historia, sino también por sus imponentes paisajes, llenos de lugares atrapantes y de variadas sorpresas para los visitantes. En avión, se puede llegar directamente al Aeropuerto Internacional de Pajas Blancas, pero la terminal de ómnibus local es la que recibe a la mayoría de los visitantes que llegan desde todo el país.
En sus calles y paseos aparecen huellas de la antigua arquitectura colonial mezclada con modernos edificios. Todo, alternado con parques y espacios verdes como el Parque Sarmiento, diseñado a fines del siglo XIX, que logra darle oxígeno a esta gran urbe y a sus habitantes.
El
turismo en Córdoba y en el resto de la provincia cuenta con cientos de actividades inagotables para que el visitante se sienta a gusto. Hablando de circuitos dentro de la ciudad, aparecen las caminatas por las peatonales que enlazan la plaza San Martín con la centenaria Catedral, el Cabildo Histórico, la Casa de Trejo y distintos museos, entre tantos otros.
En las afueras de la capital cordobesa se pueden efectuar distintas actividades de turismo aventura o turismo alternativo, como excursiones en vehículos 4x4, pesca de pejerreyes y truchas en sus diques,
mountain bike, parapente o
trekking en una de las regiones más bellas de la Argentina.
Al caer el sol, la ciudad presenta una activa vida nocturna y cultural que se manifiesta en las salas llenas de espectáculos artísticos y de esparcimiento. La música típica de Córdoba es el cuarteto (cuyos grandes exponentes son el famoso Mona Giménez y el recordado Rodrigo) y sus bailes son otro de los íconos de nuestro país. El fernet con cola, como dicen los cordobeses, es la bebida típica con que se recibe al visitante y que engalana en su sabor el verdadero “sentir cordobés”.
Córdoba es una ciudad para sentirla y disfrutarla plenamente durante las cuatro estaciones del año.