Fuera de temporada, es una de las ciudades balnearias más importantes a la vera del Atlántico, Villa Gesell ofrece una excelente infraestructura hotelera y de servicios turísticos tanto para el relax como para el esparcimiento todo el año.
Ubicada en la provincia de Buenos Aires, a 350 km de Buenos Aires, Capital Federal. Una notable obra de forestación ha logrado fijar los médanos y transformar la zona en un área boscosa, donde proliferan tamarindos, pinos, acacias y eucaliptos que rodean a la moderna Villa Gesell y sus calles asimétricas y ondulantes, junto con sus innovadoras edificaciones.
El principal atractivo de Villa Gesell reside en sus hermosas playas, totalmente desoladas cuando comienza el frío invernal.
Los numerosos visitantes ya no pueden disfrutar de sus paradores (solo unos pocos se encuentran abiertos todo el año) pero sí de largas caminatas o travesías en 4x4 hasta el Faro Querandí o por la Reserva Dunas Norte.
El muelle local es otro de los atractivos que tiene la ciudad. Es que este hito de la ciudad oficia de lugar de encuentro de decenas de pescadores que concurren a él en busca de los pejerreyes que traen los meses de Junio, Julio y Agosto.
Y es durante estos meses de frío, cuando la visita al museo local se vuelve imperdible. Dedicado a la vida y la obra del fundador de Villa Gesell, en su interior se devela la esencia de su creación, la historia de sus habitantes y el espíritu inventor de un hombre llamado Carlos Idaho Gesell.
Por eso no hay dudas. Sobran las excusas para visitar la villa en invierno. Un destino realmente imperdible para hacer mar este invierno.