4 Ene 2018 
por Pablo Etchevers 
Durante todo el año el muelle es uno de los iconos históricos que tiene la ciudad. En verano se llena de turistas pescadores y de otros visitantes que buscan en él un lugar para encontrarse con amigos para luego ver que hacen.
El muelle de Gesell lleva varias décadas en el mismo sitio, un punto característico de esta localidad turística. El Club de Pesca, Caza y Náutica de Villa Gesell es el encargado de mantenerlo.
Ubicado sobre la Av. Costanera y la calle 128, se encuentra coqueto, contando historias de peces gigantes y de pescadores memorables ni bien nos acercamos al mostrador para pagar la entrada.
De día la pesca con caña manda, mientras que de noche, los mediomundos se apoderan de la larga estructura de hormigón y dan vida a un sube y baja único.
En la entrada al muelle, lugar donde "se esperan" todos los turistas, encontramos una placa que homenajeaba a un perro fiel a quien llamaron Pancho. Según ese cartel, acompañó a su amo por muchos años y se quedó a vivir en ese sitio aun después de su muerte.
Frente al muelle también se encuentra el Restaurante del Club de Pescadores, otro lugar perfecto para disfrutar de una buena cena o almuerzo y conocer Villa Gesell desde las vivencias y anécdotas de sus vecinos habituales.
Con más de cuarenta años de vida, el muelle siempre es valorado por turistas y locales. Cornalitos, pejerreyes, lisas y otros habitantes del mar son solo una excusa pera conocer este hermoso lugar más allá de ser fanático o no de la pesca.
