En El Bolsón, cualquiera sea el lugar adonde uno decida ir, el Piltriquitrón siempre es el punto de referencia. Su nombre, tan difícil de pronunciar para los que no somos del lugar, significa en lengua mapuche "colgado de las nubes" y efectivamente esa es la apariencia que da los días de lluvia o nublados.
Los interesados en magnetismo y radiestesia escucharán hablar de que el “Piltri” emana una energía especial que mejora el estado de ánimo. Cierto o no, este cerro tiene su especial encanto que se extiende sobre todo el valle.
Para recorrerlo hay que alejarse unos kilómetros del centro de la ciudad y tomar un camino de ripio que va ascendiendo el faldeo hasta llegar a la plataforma del cerro, situada a 1.200 m.s.n.m. En este punto se encuentra un sendero que nos dirige al Bosque Tallado y otro camino más corto que va a la base de lanzamiento de los parapentes. Ya desde este punto, las vistas son espectaculares, pero las mejores panorámicas están más arriba.
Una frondosa vegetación típica crece en toda la ladera, principalmente los bosques de cipreses y cohiues junto a los espinos negros y otros arbustos que invaden todos los rincones. En otoño las tonalidades ocres, doradas y naranjas visten la montaña otorgándole más belleza al paisaje.