Calafate, la ciudad del Glaciar
A 316 kilómetros de Río Gallegos, capital de la provincia de Santa Cruz, se encuentra la ciudad de El Calafate, que toma su nombre del pequeño arbusto homónimo típico del sur patagónico del cual se extrae un fruto.
El Aeropuerto Internacional El Calafate, ubicado a 23 kilómetros del centro de la ciudad, es destino de los vuelos directos que llegan de ciudades como Buenos Aires, Ushuaia, Puerto Madryn, Trelew, San Carlos de Bariloche y Puerto Natales.
El Calafate es hoy un destino mundial. Parte de la estepa patagónica, El Calafate es un importante centro turístico que ha adquirido trascendencia nacional e internacional en los últimos años. Sus lujosos hoteles y sus típicos restaurantes han logrado posicionar a esta ciudad como uno de los destinos mundiales que merecen conocerse.
El rompimiento del glaciar Perito Moreno, el cordero patagónico que se sirve en los restaurantes y la posibilidad de realizar excursiones de lo más variadas logran convocar a miles de visitantes en cualquier temporada del año.
En Invierno y con frío, la ciudad se vuelve perfecta para disfrutar sus atractivos turísticos sabiendo que una vez terminada la excursión nos espera el calor del hogar y la chimenea que nos puede brindar cualquiera de los hoteles u hosterías donde nos hospedamos.
El Chaltén, el pueblo "nuevo"
Para llegar desde Calafate, hay que transitar sólo 212 kilómetros por una ruta nueva y totalmente pavimentada que costea el lago Argentino y luego el lago Viedma hasta que se divisa ante nuestros ojos la inmensidad y grandeza del cerro Fitz Roy, en cuya base se encuentra El Chaltén.
Bautizado como la "capital nacional del trekking", El Chaltén debe su existencia a un conflicto limítrofe con el país vecino que se resolvió finalmente en el año 1997, y que logró hacerlo conocido en el mundo para los amantes de los deportes de aventura y en especial de los caminantes.
La majestuosa presencia del cerro Fitz Roy es inconfundible. Casi todo el año su cumbre se encuentra cubierta por una nube que los tehuelches, habitantes originarios del lugar, confundieron con humo. De ahí el nombre de "chaltén" que significa "montaña que humea". El hombre blanco llamó a este cerro Fitz Roy en honor al primer escalador que hizo cumbre en este particular y bello macizo de piedra.
Desde sus inicios, el pueblo llamó la atención de andinistas y escaladores por ser el punto más cercano desde donde se podía hacer base para escalar el famoso Fitz Roy, pero a medida que se lo conoce se sabe que además del montañismo, la naturaleza posee aquí verdaderos santuarios para ir de pesca, caminar o bien deleitarse con la belleza casi virgen de este paisaje.
Hoy, son más de mil sus habitantes estables, cifra que se multiplica hasta 20 veces con la llegada de la primavera y el verano. De noviembre a mayo, El Chaltén es visitado por turistas de todo el mundo que se acercan para disfrutarlo y caminar por algunos de sus senderos, que parten desde el mismo pueblo y son aptos para todo público, de acuerdo a los distintos grados de dificultad.