El cerro Piltriquitrón y el río Quemquentreu resguardan la ciudad de El Bolsón y son un referente de los paseos tradicionales. El área urbana es digna de un recorrido lento y cuidadoso para encontrar cada uno de los puntos más reconocidos y visitados por los turistas.
Llegamos a la localidad al tiempo en que la Feria Regional de Artesanos estaba en su apogeo en la plaza Pagano. Recorrimos uno a uno sus puestos plagados de piezas artesanales realizadas con madera, lanas o cuero, flores secas, velas y otros. El movimiento humano y el colorido del conjunto hacen que uno no quiera irse.
Además de objetos únicos, se venden productos elaborados en la zona como fruta fina, dulces, licores y cerveza artesanal. A su vez, malabaristas, bailarines y músicos acompañan con su arte el momento. La cooperativa de artesanos tiene su local propio en avenida San Martín al 1800.
Decidimos pasar por la oficina de informes turísticos de la municipalidad, en San Martín y Roca, donde nos enteramos de una visita guiada peatonal, gratuita, y no dudamos en integrarnos a ella. Fue una forma muy agradable de conocer a fondo la idiosincrasia de esta ciudad sureña, su historia y sus anécdotas. Llegamos hasta el camino a Los Nogales, donde se originó el pueblo.