Con la luna en las termas de La Paz

De noche todo se ve diferente e incluso se siente diferente. Por eso llegar a las termas de La Paz cuando ya ha oscurecido es una experiencia tan especial, que parece más bien sacada de un cuento de ciencia ficción.


Cambia, todo cambia

De noche, mientras nos dirigimos hacia el complejo termal, un grupo de luces amarillas le dan color a la oscuridad del monte cerrado y sus barrancas. Esas luces amarillas no son otra cosa que las propias termas, que comienzan a delinearse a medida que nos acercamos.

La bruma de las piletas se mantiene apenas por encima del agua y el vapor que emana de ellas es tan tentador, que invita a entrar. 37º C es lo que marca el cartel en la pileta que elegimos y basta con introducir un pie para que todo el cuerpo experimente una sensación indescriptible.

Bajo la luz de la luna

La salinidad de estas agua, cuatro veces mayor que las del mar, permite al visitante flotar en cualquiera de las posiciones que adopte su cuerpo. No es raro ver a algunos que, diario en mano, se sacan alguna foto de recuerdo como si estuviesen en el famoso Mar Muerto, donde es imposible sumergirse debido a la elevadísima salinidad del agua.

Ubicado sobre las barrancas del río Paraná, este complejo de piletas termales tiene de noche también una de las vistas panorámicas más hermosas que se puede tener del río y de sus laberínticas islas.


Mirar y buscar estrellas

Con el cuerpo sumergido hasta el cuello, una de las actividades preferidas de los bañistas nocturnos es mirar hacia el cielo y descubrir la infinidad de estrellas que componen la vía láctea y el resto de las formaciones. ¿Quién hubiera pensado hace un tiempo que buscar satélites o estrellas fugaces se haría una costumbre entre los locales y los visitantes de las termas?

No hay duda de que la diversidad de piletas de distintas medidas, profundidades y temperaturas lo han hecho posible, logrando que muchos de los visitantes disfruten de todas las actividades recreativas del día y afirmen que el momento ideal para relajar mente y cuerpo es la noche.

Más información sobre las termas de La Paz.