Avistaje de aves en Surucuá

A solo dos horas de las Cataratas del Iguazú se encuentra un lugar pensado para vivir experiencias inolvidables en pleno contacto con la naturaleza, con actividades basadas en el descubrimiento de la vida de la selva.

Surucuá Reserva & Ecolodge es un refugio dentro de la selva rodeado de áreas protegidas, donde se brinda alojamiento, gastronomía, actividades de ecoturismo y aventura, todo bajo la atenta atención de sus propios dueños.

En estos senderos y acompañados por guías, los huéspedes pueden interpretar los misterios y conocer las principales características de la selva paranaense, observando los árboles y arbustos que conforman los distintos estratos, y oyendo los diferentes sonidos provocados por las especies de aves e insectos.

También, deslumbrarse con las bellas y coloridas orquídeas y mariposas, y observar las huellas de la fauna que habita la zona y culminar el recorrido con una excepcional vista del río Iguazú.

Una caminata nocturna hace que los huéspedes sientan la transformación de la selva cuando cae la noche, agudizando todos sus sentidos para distinguir los sonidos de la fauna nocturna y las formas que se confunden con la oscuridad.

La navegación por el río Iguazú en kayaks imprime a la experiencia un componente de aventura al atravesar suaves rápidos sin dejar de lado la seguridad. Una forma divertida para que grandes y chicos se mimeticen con este curso de agua y miren todo desde el agua.

Surcando el río se pueden observar islotes poblados de garzas, especies de aves y flora vinculadas al agua y, con un poco de suerte, algunos de los animales como lobitos de río, yacarés y carpinchos. Todo esto enmarcado por un paisaje de selva.

Además, una amplia red de senderos para avistaje de aves, fotografías, identificación de especies, observación de orquídeas, mariposas e insectos es parte del Surucuá Reserva & Ecolodge.

La reserva se encuentra atravesando el Parque Nacional Iguazú por la ruta 101, a 25 kilómetros de la localidad de Andresito. Allí, Laura y Adrián los esperan para aprender y disfrutar de la exuberancia de la selva misionera y para hacer realidad los sueños de quien llega a este lugar.

Un lujo para quien se anime.