La gastronomía es uno de los fuertes de la ciudad de Ushuaia. Valorada por los locales y por turistas de todo el mundo, vale la pena conocerla.
Dicen los que saben que comer centolla del canal de Beagle es una de las cosas que no puede dejar de hacerse en Ushuaia. Además de este singular plato, los restaurantes locales invitan a los comensales a descubrir las bondades de la merluza negra, los mariscos y el tradicional cordero.
Kuar, un placer casi divino
Ushuaia tiene lugares únicos para comer, algunos inolvidables. Kuar es un restaurante que se ubica camino a uno de los cerros de la ciudad. Desde sus mesas se tiene una vista panorámica increíble de la ciudad austral.
Exquisiteces propias de la casa y de la afamada agenda del autor, en cada uno de los platos se cuidan detalles que los comensales aprecian a simple vista.
“Kuar” significa “canal” en lengua yamana (propia de los pueblos originarios que habitaron esta región hace miles de años). Famoso por sus pastas, sus ravioles negros de salmón ahumado son impresionantes. Por su cordero y su centolla Kuar es sin duda uno de esos lugares que el visitante tiene que conocer.
Su tutor, Andrés Ayala, es uno de los cocineros más prestigiosos de Ushuaia y esto se ve en los variados sabores de su carta, la cual se renueva temporada por temporada.
Tante Sara, tradición en mariscos y excelentes pastas
Hay que traspasar la puerta de entrada a Tante Sara para descubrir un mundo de aromas únicos capaces de prolongar desayunos, almuerzos y cenas. Todos los días, de la cocina salen verdaderas creaciones de autor que combinan de manera increíble las mejores pastas de la isla con los mariscos y frutos de mar más frescos del Canal de Beagle.
El diseño moderno del lugar (que no por ello deja de ser cálido) invita a disfrutar tanto del sector café-panadería como del restaurante donde cómodos sillones invitan a tomar asiento. La atención es perfecta y la calidad de los platos recibe a menudo aplausos y festejos de los comensales. Es para muchos uno de los mejores restaurantes donde se mezclan pastas y mariscos, con protagonistas como los raviolines de centolla o los ravioles bicolores de centolla y camarones, los spaghetti negros de frutos de mar o los mismos pero con salsas de mariscos. El guiso de cordero es otra de las especialidades de la casa y se lo acompaña rigurosamente con un buen vino, generalmente un malbec. De postre hay variedad, pero el famoso Cumbres Nevadas resulta el más elegido.
Tante Sara, un lugar donde comer sigue siendo un placer a cualquier hora del día, en familia y con amigos.
Christopher, sabores jóvenes
En pleno centro y pegado a la bahía, encontramos el restaurante Christopher Grill & Cerveza, famoso por sus especialidades al horno de barro y de parrilla a las brasas. Al abrir la puerta, nos enfrentamos con un ambiente muy moderno, de estilo americano con un toque patagónico muy agradable.
Una barra amplia y vidriada nos invitó a tomar un trago antes de sentarnos a cenar. Los barmen, muy atentos, nos sugirieron el coctel cocodrillo y la copa caipiamado, con el toque personal de la casa. Las señoras tomaron un daikiri de frutilla y durazno bien servido.
Pasamos a la mesa y al tener en la mano la carta notamos la gran variedad de platos, algunos de origen latinoamericano, y una vasta selección de pizzas. Cada uno eligió a su agrado: ribs de cerdo grilladas, pechuga de pollo a las brasas con papas al horno de barro y salsa criolla; para los más chicos, el clásico pastel de papa o los gnocchi con salsa boloñesa. Apreciamos la abundancia, buen aspecto y exquisitez de cada una de las presentaciones.
Para momentos más informales se puede degustar una selección de sus cervezas artesanales negra, rubia, roja, miel y ahumada. Pueden acompañarse de apetitosas empanadas de carne cortada a cuchillo al horno de barro u otras especialidades al paso.
Los ventanales miran hacia el canal de Beagle y, en primer plano, se encuentra el viejo e histórico remolcador Saint Christopher, un buen dato para no perderse este salón del buen comer en la ciudad.
Gustino: comer bien en el fin del mundo
Gustino es un espacio gastronómico ubicado en el centro de la ciudad de Ushuaia, que reúne en su propuesta la excelencia de su gastronomía regional con una amplia variedad de servicios. La carta posee todo lo que el visitante busca, como los platos más tradicionales de la región elaborados con insumos de productores locales, a los que se suman la experiencia y la creación de los distinguidos chefs.
Bien temprano, el desayuno regional sobre el canal de Beagle es una propuesta imposible de rechazar. Al mediodía, los mariscos, pescados y carnes se ganan los aplausos. Y es cuando comienza a caer el sol que un chocolate caliente acompañado de pastelería casera resulta el cierre ideal para una tarde llena de actividades, como son las tardes de todos los que visitan la ciudad más austral del mundo. A la hora de la cena, la cocina promete disfrutar de una auténtica experiencia de sabores regionales. Un viaje a lo imposible.
Delicias del pasado en Kuar 1900
En pleno centro de la ciudad de Ushuaia, ubicado sobre la calle San Martín, y en una antigua Casona del año 1905 que perteneció a los antiguos pobladores de Tierra del Fuego se encuentra Kuar 1900. La casa, que fuera de la Familia Luizon, fue reciclada de manera perfecta para que allí funcione una nueva opción de la excelente gastronomía fueguina que tiene Ushuaia.
El visitante quedará sorprendido por los platos y creaciones culinarias con productos regionales ( centolla, merluza negra, trucha y cordero, entre otros), como también por las ya famosas tablas de picadas, de mar y montaña, acompañadas de excelentes cervezas artesanales locales. Reina la calidez y el buen trato, como para no querernos ir nunca del fin del Mundo.
La Cravia Restaurant, esos placeres merecidos
La Cravia es un hermoso restaurante que nos sorprende conjugando típicos sabores fueguinos con la alta cocina argentina e internacional. Con opción buffet y a la carta; conviven aquí la auténtica parrilla argentina, la centolla, el cordero patagónico y la merluza negra, solo por mencionar algunos exponentes, que invitan a disfrutar esta experiencia gastronómica que se vuelve extraordinaria con las asombrosas vistas hacia el Canal Beagle y la ciudad de Ushuaia.
Sus vistas perfectas, su cocina para exigentes y la calidez del servicio hacen de este lugar uno de los restaurantes más hermosos del fin del mundo que quién visita la ciudad debería disfrutar por lo menos una vez en la vida.