El Palacio San José fue residencia familiar de Justo José de Urquiza, primer presidente constitucional de Argentina. Hoy en día es Museo y Monumento Histórico Nacional, donde la colección de documentos, mobiliario, objetos y pinturas ofrece una experiencia educativa completa.
Museo histórico
Algunos tramos de la historia argentina del siglo XIX se cuentan en este palacio ubicado en el departamento de Concepción del Uruguay en la provincia de Entre Ríos. El nombre original era Posta San José, desde donde el general Urquiza gobernaba y manejaba los hilos del destino de la Confederación, más allá de que la sede de gobierno estuviera en Paraná. La transición de construcción postcolonial en sus inicios en 1848 hasta la envoltura palaciega de cúpulas, patios y torres hizo que la gente comenzara a llamarlo palacio.
Se trata de un casco de estancia, cuya obra demandó varias etapas de construcción entre 1848 y 1860. La primera casa de campo fue modificada por el arquitecto Jacinto Dellepiane y continuada luego por Pietro Fossati, ambos italianos, cuya mayor trascendencia llega desde esta obra con tres patios de arquitectura italianizante. Este tipo de arquitectura tuvo su apogeo entre 1830 y 1880 en Argentina, como un paso de transición entre la era colonial y el arte francés que dominó Buenos Aires en las primeras décadas de 1900. El Palacio es uno de los mejores ejemplos de esta época arquitectónica.
La estancia del general Urquiza funcionaba como centro económico regional. Junto con el aumento de la producción de hortalizas y verduras, miel, vinos, lácteos y molienda, la necesidad hizo que la casa de campo se extendiera en habitaciones, dependencias de servicio, patios y comodidad. Dellepiane fue el encargado de esta construcción funcional a la vida de sus habitantes. Fossati asumió el último tramo de la construcción para convertir la casa en un palacio, cuya cereza es la capilla de base octogonal y decoración con pinturas murales realizadas por Juan Manuel Blanes.
La urdimbre entre la situación política y la construcción de la casa recorre la imagen de Urquiza como “el caudillo” que pintó Sarmiento que quiere desprenderse de la rusticidad de campo para transformar su casa en el palacio que da la bienvenida a la escena histórica y social, incluso artística de la región, con todos los avances tecnológicos de la época. Los jardines del palacio también merecen un recorrido especial para imaginar qué significó semejante paisaje en medio del monte entrerriano y épocas convulsas.
En 1994 los convencionales constituyentes realizaron el juramento a la Carta Magna en el Palacio San José, cuyo dueño y fundador fue impulsor de la primera Constitución Nacional de 1853. El museo cuenta con una biblioteca y archivo documental que, en conjunto, conforman uno de los acervos más importantes de la región.
Miriam Coronel 
