Pesca con mosca en Caviahue

De acuerdo con los dichos de los lugareños, existen espacios en los cuales viven las truchas, donde se desarrollan y se las encuentra en cantidad.

En Caviahue el interés por la pesca con mosca ha crecido últimamente, y así lo demuestran tanto los locales como los visitantes que hacen su experiencia con cañas y reels adecuados. Ríos, arroyos y lagunas de la región ofrecen al pescador deportivo la posibilidad de disfrutar de largas caminatas y de “mosquear” con excelentes resultados.

Es esencial el catch & release, una acción básica para los verdaderos mosqueros, con el fin de preservar las especies. Es de destacar que la zona no cuenta con estaciones de piscicultura que repongan los peces de forma constante.

Realizamos una recorrida con un habitué de la actividad en la región y le consultamos acerca de la posibilidad de tirar la caña en el primer lago que tuvimos enfrente: el Caviahue. El alto grado de azufre de sus aguas no permite el desarrollo de peces y, por lo tanto, no hay qué atrapar.

  • Equipo de mosca

    Equipo de mosca

  • Un lugar ideal

    Un lugar ideal

  • Saber elegir...

    Saber elegir...

  • Un momento apasionante

    Un momento apasionante

En cambio, la laguna Hualcupén, a pocos kilómetros de la localidad, es una de las más frecuentadas. El camino para acceder a ella es realmente bonito y permite ver como se desarrolla la vida de las comunidades mapuches del lugar, siempre con total respeto por la naturaleza.

En ese lugar, se deben “leer” las correderas y los “pozones” del arroyo Hualcupén para utilizar las moscas secas y ninfas adecuadas. Como resultado, se logra la obtención de truchas medianas y muy batalladoras.

Otras lagunas cercanas son la Trolope, la Larga, la Escondida, la Achacosa y la Rincón. Esta última tiene fama de albergar truchas grandes que suelen ser servidas en los restaurantes de Caviahue y Copahue. En general, en estos ámbitos se logran las arcoíris y se han obtenido piezas récord de 6 a 8 kilos de peso. Quizás existan otras mayores.

Es ideal intentar la pesca en las bocas estrechas de arroyos que llegan a un cauce principal del río; allí es donde los peces aguardan los insectos pequeños y hasta crustáceos que desliza la corriente.

La técnica es lanzar el señuelo agua arriba y dejar que derive hasta donde esperan las truchas. Pudimos comprobar que, casi siempre, pican enseguida. Según los pescadores del lugar, los ejemplares adultos reproductores buscan la profundidad de las lagunas y esos sí que, si bien se logran de vez en cuando, superan el peso antes mencionado.

Si se visita la comarca, aconsejamos no olvidar el equipo de mosca, ya que más de un pescador se llevará una sorpresa agradable al enfrentar sus espejos de agua.

Autor Mónica Pons Fotografo Pablo Etchevers

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