En las noches de verano, San Martín de los Andes suma a sus presentaciones culturales cotidianas dos momentos en los que nadie se queda en casa: las Noches de las Artes.
San Martín de los Andes es reconocida por sus paisajes, por la calidez de su gente y por una comunidad amante de las actividades de la cultura en sus distintas manifestaciones.
Durante una noche en el mes de enero y otra en el mes de febrero, la avenida San Martín se convierte en peatonal y es lugar de encuentro para presentaciones populares. Bandas de rock, artistas plásticos, música folclórica, magos y payasos despliegan sus habilidades frente a un público que los rodea y aplaude.
En cada ocasión las expresiones artísticas se multiplican, se suman nuevas propuestas. El resultado es una calle con infinidad de entretenimientos y la posibilidad de comprar en los negocios que adhieren a la fiesta.
La concurrencia deambula a lo largo de cinco cuadras y mientras un acróbata hace piruetas sobre su monociclo, a pocos metros una cantante entona una melodía folclórica. Un poco más adelante, un grupo de percusionistas logra que todos los presentes bailen y se muevan a su ritmo. Así de heterogéneo es el evento.
Si la noche acompaña con buena temperatura y cielo despejado, la dicha es completa y todos, sanmartinenses y visitantes, salen a caminar en familia. El espíritu de alegría recién se apaga cuando, a las doce de la noche, la Noche de las Artes se despide hasta una nueva edición.