Aunque el perfil joven se mantiene y Gesell es casi dueña de la movida nocturna, la villa apunta a un público familiar, más aún luego de la recuperación del frente marítimo y su acceso. Las playas geselinas gozan de todo el esplendor de sus mejores tiempos y atraviesan siempre un espíritu romántico sin igual. Aquí, 3 balnearios que no podés dejar de visitar esta temporada.
Es uno de los paradores más populares en Villa Gesell. Ubicado entre las opciones céntricas, ofrece un plan de actividades recreativas para niños, torneos de juegos de mesa y vóley playero, clases de yoga en la playa. Amarelo pone a disposición sillas adaptadas para personas con movilidad reducida. Los platos tienen muy buenos comentarios, por lo rico y abundante.
Cerca del bosque norte, rodeado de dunas, Ola-lá está comandado por una familia local, que conoce de la belleza de Gesell y el mar. El parador tiene una estética completa de madera y la terraza es el lugar para degustar los sabores del restaurante, cuyos desayunos y cosas ricas a la tarde no tienen desperdicio. Es un balneario integral, que cubre todas las comodidades en la playa, incluso es amigable con las mascotas.
Con una atención muy cuidada de los anfitriones, Sunset es un parador que vuelve a ser elegido por los clientes habituales. Se crea un cálido ambiente familiar para disfrutar del día de playa y tiene opciones de buenos platos para almorzar en la terraza, mirando hacia al mar. Es un espacio para pasar un tiempo reconfortante y de descanso. Además, es otro sitio donde se puede llevar al amigo perruno.