Al sur de la ciudad se encuentra el barrio denominado Las Caleras o 5to Cuartel. Este fue el primer asentamiento español en tierras victorianas y fueron los vascos quienes llegaron primero.
Dejar la madre patria
Desde principios del siglo XIX, los vascos de diferentes regiones del norte de España por diversas causas se vieron obligados a dejar su país natal en busca de nuevas oportunidades en el continente americano. Argentina fue un lugar donde el inmigrante era bien recibido.
Las primeras ciudades adonde fueron son Rosario y Paraná, pero ya para ese entonces todo el territorio de islas comenzaba lentamente a poblarse y Victoria, cuyos primeros asentamientos datan de 1810, comenzaba a ser un interesante punto en el mapa.
De a poco el lugar fue poblándose de hornos caleros y, junto a éstos, se instalaban los vascos con sus respectivas familias que algunos traían de Europa varios años más tarde.
Hornos de cal y pan
Para 1820, el Quinto Cuartel era el barrio más poblado de la ciudad, con decenas de hornos de cal donde se trabajaba la piedra caliza que provenía de los alrededores de Victoria, por ese entonces conocida como La Matanza.
El protagonismo que cobró la actividad hizo que rápidamente el barrio adoptara el nombre de Las Caleras. A diferencia de otros centros urbanos de aquellos tiempos, este barrio se levantaba en forma aislada, con grandes hornos alrededor de los cuales sus habitantes construían sus residencias. Hoy esas casas, aunque semidestruidas y abandonadas, se mantienen intactas y pueden observarse.
La Dirección de Turismo local ha realizado un mapa que permite al turista recorrer las construcciones más emblemáticas e importantes de aquella época.
Visitas guiadas
La calle Intendente Cudini, que viene desde la ciudad con el nombre de Boulevard Moreno, oficia de entrada al viejo barrio. Entre las construcciones más destacadas se encuentran:
1) El polvorín de Las Caleras
2) Las casas primitivas
3) Las casas de fines del siglo XIX
4) Las casas de la 2da mitad del siglo XIX
5) Las caleras a vapor
6) La casa de Reggiardo (1858)
7) La casa de Ruschin Fontana (1878)
8) Los hornos de cal
9) La Subprefectura
10) Los hornos de Reggiardo
11) Banco Laneri
12) La cancha de pelotas
13) El cuartel de Policía
14) La cancha de bochas
15) Cruz del Agua
Quince puntos maravillosos que permiten recorrer el barrio a pie o en vehículo y tomar de este modo un contacto inmediato con lo que fueron esos tiempos pasados, cuando no había absolutamente nada y todo estaba aún por hacerse.
Lo aprendido lo ponían en práctica aquí. Estas casas, construidas con una lógica europea que no existía en estas tierras, sirven de ejemplo de los valores que los vascos trajeron.
Banco, puerto y luego adiós
Tal fue la importancia y el auge que la zona generaba que, además de constituirse allí el puerto más importante de la ciudad, durante años funcionó un banco (impensable para aquella época) donde Victoria emitía su propio dinero.
Este banco se denominó Banco Laneri y aún hoy conserva su esqueleto que puede visitarse y observarse a simple vista. A comienzos de 1900, todavía los frutos y productos salían por allí.
Al industrializarse la piedra caliza, el barrio de Las Caleras continuaba su auge, pero lentamente este se fue perdiendo. Primero fue el tren que llegaba, cuya estación se encontraba en la ciudad de Victoria. Luego, fue el nacimiento del nuevo puerto, justo frente a la nueva estación.
Lo cierto es que de a poco el barrio Las Caleras se fue despoblando. Cerró su banco. Uno a uno lo siguieron los hornos de cal. Y así, simplemente, el presente orientó su rumbo hacia un futuro en que lejos estaba el 5to Cuartel de ser protagonista.
Pablo Etchevers 
