Recorridos en bicicleta por Villa La Angostura

Villa La Angostura ofrece una gran variedad de posibilidades si uno quiere entrar en contacto con la naturaleza y recorrer. El mejor modo de hacerlo es con una bicicleta.

Si uno quiere recorrer, llegar a rincones escondidos, vivir la aventura o estar en contacto directo con la naturaleza, no hay nada mejor que una excursión en bicicleta. Villa La Angostura ofrece una infinidad de posibles destinos que esperan al visitante curioso. Las bicicletas se pueden alquilar en el lugar, hay propuestas que se ajustan a diferentes niveles de exigencias; basta con estar dispuesto.

A continuación presentamos cuatro alternativas de paseos que permiten el acceso a diferentes lugares de Villa La Angostura. Los recorridos son de día completo y se pueden realizar en familia.


Primera salida

Este primer recorrido nos lleva hacia el este desde el corazón del pueblo por la ruta 237. El primer destino es el río Bonito, que se encuentra a cinco kilómetros del pueblo. Llegamos a él por el asfalto, luego de pasar el desvío al Cerro Bayo. Las piedras en sus orillas son ideales para descansar un rato.

  • Saliendo de la Villa

    Saliendo de la Villa

  • Infinidad de posibles destinos

    Infinidad de posibles destinos

  • En grupos

    En grupos

  • Entrar en contacto con la naturaleza

    Entrar en contacto con la naturaleza

  • Las bicicletas se pueden alquilar

    Las bicicletas se pueden alquilar

  • Momentos inolvidables

    Momentos inolvidables

  • Nos aprovisionamos

    Nos aprovisionamos

Después, retomamos la ruta y seguimos en la misma dirección un kilómetro más hasta alcanzar la entrada a la península de Puerto Manzano. Este lugar pintoresco, con sus bahías que dan sobre el lago Nahuel Huapi, invita a pasar la tarde y disfrutar del paisaje. A pesar del encanto del lugar, es importante recordar que falta todavía el regreso a Villa La Angostura, de unos siete kilómetros, por lo que recomendamos no esperar demasiado para emprender la vuelta, para evitar así andar con la bicicleta de noche.


Segunda salida

Esta vez salimos del centro con dirección noroeste por la avenida de los Siete Lagos. Después de un kilómetro encontramos la calle Cacique Antiau, que corta la avenida. Ahí doblamos hacia la derecha y emprendimos el camino que lleva, todo en subida, hacia el mirador del cerro Belvedere. Una vez ahí pudimos disfrutar de las hermosas vistas de toda la villa, del lago Correntoso, del Nahuel Huapi y del Espejo. Es una subida cansadora, pero bien vale el esfuerzo.

Así como llegar había sido todo en subida, la vuelta es pura bajada y al llegar a la avenida de los Siete Lagos la retomamos un kilómetro más hasta el desvío que se abre a mano izquierda hacia el río Correntoso. Desde el hermoso puente de madera pudimos contemplar de frente el lago Correntoso y, a nuestras espaldas, el Nahuel Huapi. A veces se llegan a ver truchas en el río. Es un lugar ideal para hacer un alto y almorzar.

Terminado el descanso, retomamos la ruta y seguimos unos cuatro kilómetros hasta el cruce que lleva a la derecha hacia San Martín de los Andes y a la izquierda, hacia Chile. Tomamos por la derecha y unos cien metros más adelante entramos en el camino que lleva al lago Espejo.

Se trata de un hermoso lago que invita a pasar la tarde en sus orillas rodeadas de una naturaleza agreste. De nuevo, es importante calcular el tiempo necesario para la vuelta a Villa La Angostura, para que no nos sorprenda la noche.


Tercera salida

Este es el recorrido de la adrenalina. Nuevamente salimos por la ruta 237 y tomamos camino hacia el Cerro Bayo. Son seis kilómetros de ascenso por una ruta de ripio; quien prefiera puede optar por un servicio de transporte hasta la base del cerro.

Utilizando los medios de elevación, subimos con la bicicleta hasta el refugio del Club Andino, donde nace un camino panorámico. Lo tomamos y pronto estábamos disfrutando de la vista de la villa, del cerro Tronador, la Isla Victoria, Bariloche y las agujas del cerro Catedral.

Este mismo camino nos llevó de nuevo a la base del cerro, donde paramos para almorzar y recuperar energías. Ya listos, emprendimos el camino de vuelta a Villa La Angostura: nueve kilómetros de bajada continua. A pesar de la sensación de adrenalina, hay que avanzar con cuidado porque se puede tomar mucha velocidad. Es importante siempre usar un casco. Es un camino sinuoso que permite vivir realmente la velocidad.


Cuarta salida

Este recorrido, mucho más pintoresco y tranquilo, permite un contacto mayor con la naturaleza. Salimos de Villa La Angostura con dirección al puerto, a unos tres kilómetros del centro. Allí encontramos el muelle de madera de Prefectura.

Estábamos en la entrada al Parque Nacional Los Arrayanes/Península de Quetrihué. Entramos para conocer el magnífico bosque de arrayanes, que cubre doce hectáreas. La principal maravilla son estos árboles color canela, pero también encotramos muchas otras especies vegetales, como el palo santo, el maitén y el laurel. También suman su presencia aves como el zorzal patagónico y las garzas brujas.

En el camino de regreso, sentimos el cansancio por el esfuerzo realizado, pero nos quedaba todavía un lugar por visitar. Se trata de la capilla de la Asunción, que se encuentra en el camino al pueblo desde el puerto.

Estas son solo algunas de las propuestas de lo que se puede recorrer en los alrededores de Villa La Angostura con bicicleta. Cualquiera que se elija, seguro será la ocasión de momentos inolvidables.

Autor Marcos Rodríguez Fotografo Eduardo Epifanio

Organiza tu viaje con: interpatagonia.com | welcomeuruguay.com | welcomechile.com