En busca del Clemente de Caloi

Desde hace algunos años se ha reconocido al barrio de Adrogué, ubicado en la zona sur del Gran Buenos Aires, como una de las localidades más prolíficas de la cultura argentina.

Figuras ilustres como el escritor Jorge Luis Borges o el humorista gráfico Carlos Loiseau (Caloi) manifestaron que durante sus respectivos años de residencia, Adrogué les sirvió de fuente de inspiración para muchas de sus obras, y por ello le guardaron un afecto muy especial.

Actualmente, la localidad conserva los mismos aires, ya que ha logrado combinar los estilos actuales de la construcción con las viejas características arquitectónicas, propias de su fundación en 1870, tales como las calles empedradas que se entretejen en numerosas diagonales y que confluyen en diversas plazas, junto con la gran cantidad de árboles y el estilo antiguo propio de muchas de sus casas.

Y así, entre vueltas y vueltas a las distintas manzanas y calles, divisamos una estatua no convencional que nos llama la atención de inmediato. ¿Es un perro? ¿Un animal mitológico? ¿Qué es?

En la intersección de Diagonal Brown y Mitre se erige la plazoleta Clemente, rodeada por cuantiosos restaurantes y bares que invitan a visitarla recurrentemente y a tomarse fotografías con el gran protagonista del lugar: el genial Clemente.

Hurgando en la memoria y hablando con viejos vecinos, descubrimos el respeto y el cariño con que hablaba Caloi cuando recordaba su viejo Adrogué, la misma ciudad que desde hace más de una década le erigió un monumento en honor a su abundante trayectoria.

Y fue Clemente, la creación más popular del humorista (que desde los años ‘70 encabezó las páginas del diario Clarín hasta la muerte de su autor, en 2012), quien se hizo estatua para inmortalizar a su creador.

La mejor opción para llegar a Adrogué es por medio de la línea de trenes General Roca, que sale desde plaza Constitución. En dirección a Alejandro Korn, el viaje dura poco más de 20 minutos y pasa por varias localidades también conocidas del conurbano como Avellaneda, Lanús y Banfield.

Sin embargo, también hay otras opciones. Por medio de las líneas de colectivos 74, 79 o 160, que también parten de la ciudad de Buenos Aires, aunque aquí el viaje puede durar más de una hora.

Cualquiera sea la opción elegida, Clemente, Caloi y Adrogué valen por sí mismos una visita, cualquiera sea el día de la semana elegido.

¿La foto de Clemente? Imperdible…