La región de Cuyo es famosa por la calidad de sus excelentes viñedos y por las importantes y abundantes represas hidroeléctricas, por lo que la pesca deportiva ha debido adaptarse a su condición de recurso "secundario". El hombre, a través de importantes obras de ingeniería, se encargó de canalizar y entubar importantes ríos para distribuir el agua en una región más que árida, y para poder obtener de estos cursos la energía eléctrica que demandaba la región. Quizás por ello, para los mendocinos es tan importante el Departamento General de Irrigación, algo ignorado y desconocido para el resto de los habitantes del país.
Numerosos cursos de agua que antes corrían libremente hoy se encuentran "embalsados" por diques y lagos artificiales. Pero a pesar de este desalentador aunque realista panorama, la región cuyana posee atractivas posibilidades para el pescador, entre las que se destacan especies de gran valor deportivo como son el pejerrey y la trucha.
El pejerrey es el gran protagonista. En los diques, lagos y embalses de la región, ya sean naturales o artificiales, alcanzan tamaños más que interesantes y se convierten en la meta de los miles de aficionados que todos los fines de semana del otoño a la primavera van en su busca.
En lo que respecta a la pesca de salmónidos, la mayoría de los ríos y arroyos de toda la precordillera, tanto sanjuanina como mendocina, resultan ideales para pescar truchas con mosca o en spinning, ya que la especie encuentra en ellos favorable correntada, aguas claras, frías y bien oxigenadas.
Malargüe, ubicada en el sur de la provincia de Mendoza y cercana al centro invernal Las Leñas, resulta ser el sitio ideal para capturar truchas arco iris y marrones de importantes portes por su proximidad a los ríos y arroyos de la zona. Entre ellos se destacan los ríos Grande, Malargüe y Salado.
San Rafael, un poco más al norte de la provincia, es otra de las localidades desde donde se puede llegar hasta el río Atuel, cuyas aguas bajan de la cordillera quedando atrapadas primero en el embalse El Nihuil y luego en el embalse Valle Grande.
Otro río a tener en cuenta por su cercanía es el Diamante, que da origen al embalse Los Reyunos, y atesora en sus aguas, junto al río Atuel, a las truchas arco iris más grandes de toda la región cuyana.
Embalses como El Carrizal, Los Reyunos, El Nihuil, Valle Grande y Cuesta del Viento, ubicados en las provincias de Mendoza y San Juan aseguran, tanto de costa como embarcado, los mejores ejemplares de pejerrey. Y en ellos también es posible capturar algunas de las grandes truchas que fueron sembradas artificialmente hace mucho tiempo y que se adaptaron exitosamente a estos nuevos ámbitos.